EL PODER DEL POMPOIR O BESO DE SINGAPUR
EJERCICIO SEXUAL PARA MUJERES:
Desarrollar los músculos de la pelvis, vientre y los específicamente vaginales, uretrales y anales son las zonas que debe cuidar la mujer si quiere convertirse en una gran amante. Estos últimos son los que deben ser desarrollados más especialmente con vistas al acto sexual.
LA TÉCNICA DEL POMPOIR:
Los árabes llamaban Kabbazah, «poseedoras» a las mujeres que tenían esta habilidad por su capacidad de apretar con sus músculos vaginales el pene del varón cuando estaba dentro. Así no solamente hacían gozar más a su compañero sino que también ellas lograban un mayor placer. Los chinos y japoneses entrenaban a las mujeres que debían ser expertas en estas artes haciéndolas «coger» cosas con la vagina, como una forma de desarrollar los músculos interiores.
Ejercitarse en el pompoir consiste en contraer los músculos perivaginales, los del esfínter uretral y los anales. Se pueden contraer estos músculos durante unos segundos y luego relajarlos para volver a comenzar una y otra vez el ciclo.
También se pueden contraer y relajar alternativamente. Los dos métodos son adecuados y pueden alternarse para hacer el ejercicio menos monótono. Creo que puedes imaginarte las cosas que puedes hacer cuando desarrolles esta habilidad y tu amante esté dentro de ti. No sólo podrás gozar más, modular más tu propio orgasmo sino que puedes hacer las delicias de él y cuando tu compañero haya llegado al orgasmo y su pene comience a languidecer, puedes apurarlo todavía más y prolongar tu gozo estrechándolo dentro de ti.
Ciclando y corazonando,
Diana Herrera.