Y de repente alguien aparece, con tantos deseos de comerse el mundo como de comerte a ti.
Llega alguien especial que acepta, tanto tu pasado, como las imperfecciones de tu ser. Llega alguien, quizás no tan herid@ como tu, pero con la disposición de curar tus heridas a besos. Y entonces llega él, lo miras a los ojos, con un enorme miedo de ser de nuevo lastimad@, pero con las ganas intactas de satisfacer tu corazón. Llega alguien que está dispuest@ a volver a hacer que creas en el amor y en…